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martes, 14 de octubre de 2014

Me siento Bendecida…

Cuando me amé de verdad, comprendí que en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto y en el momento preciso. Y, entonces, pude relajarme. Hoy sé que eso tiene nombre…
…Autoestima.

Cuando me amé de verdad, pude percibir que mi angustia y mi sufrimiento emocional, no son sino señales de que voy contra mis propias verdades. Hoy sé que eso es…
…Autenticidad.

Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera diferente, y comencé a ver que todo lo que acontece contribuye a mi crecimiento. Hoy sé que eso se llama…
…Madurez.

Cuando me amé de verdad, comencé a comprender por qué es ofensivo tratar de forzar una situación o a una persona, solo para alcanzar aquello que deseo, aún sabiendo que no es el momento o que la persona (tal vez yo mismo) no está preparada. Hoy sé que el nombre de eso es…
…Respeto.

Cuando me amé de verdad, comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable: personas y situaciones, todo y cualquier cosa que me empujara hacia abajo. Al principio, mi razón llamó egoísmo a esa actitud. Hoy sé que se llama…
…Amor propio.

Cuando me amé de verdad, dejé de preocuparme por no tener tiempo libre y desistí de hacer planes apresurados, abandoné los mega-proyectos de futuro que en realidad eran solo afán de producir. Hoy hago lo que encuentro correcto bajo la dirección de Dios, lo que me gusta, lo que me hace sentir bien, cuando quiero y a un ritmo adecuado. Hoy sé, que eso es…
…Sencillez.

Cuando me amé de verdad, desistí de querer tener siempre la razón y, con eso, erré muchas menos veces. Así descubrí la…
…Humildad.

Cuando me amé de verdad, desistí de quedar reviviendo el pasado y de preocuparme por el futuro. Ahora, me mantengo en el presente, que es donde la vida acontece. Hoy vivo un día a la vez. Y eso se llama…
…Plenitud.

Cuando me amé de verdad, comprendí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme a según yo pueda dominar mis pensamientos. Pero cuando yo la coloco al servicio de mi Dios , es una valiosa aliada. Y esto es…
…¡Saber vivir!

No debemos tener miedo de cuestionarnos… Hasta los planetas chocan y del caos nacen las estrellas.

¡Me siento bendecida!

Pastora Sugey Villasmil de Álvarez

sugey171@elrincondelpandevida.net